Y a propósito de mantener las comunicaciones fluyendo, hoy tuve una pequeña pero profunda conversación con un amigo que no veo hace mucho. Seguro les pasa todo el tiempo, pero no les voy a hablar de lo mucho que lo extrañaba ni de lo maravillosa que es la internet para mantenernos cerca de las personas que queremos, eso por cierto ya lo saben. Lo que mi hermano Fer me hizo vivir fue una experiencia de regresión a los años sesenta o setenta quizás, sin celulares, sin internet...
...seguro que el ejercicio ya lo han hecho antes, seguro que mil correos han leído sobre lo maravilloso que eran esos tiempos y otros tantos sobre que los niños eramos mas niños, que no nos enfermábamos y otros tantos que se yo. Pero el punto es: ¿era mejor antes o ahora?, ¿era mejor vivir sin celulares o es mejor tener como enterarnos al instante si algo les pasa a nuestros niños? (aún cuando el costo sea que trabajamos 24 horas al día los siete días de la semana).
Yo creo que cada quién vive su tiempo y su etapa, ya nos tocó hacer travesuras y dar alegrías, hoy nos toca ser guías y dar alegrías, y aunque los elementos hayan cambiado lo hacemos con las mismas preocupaciones, con el mismo entusiasmo, pero sobretodo con la misma esperanza de estar haciendo el mejor trabajo de todos, y en esa labor buscamos alguien, alguien que comparta nuestros días y nuestra misión, alguien con quien compartir esas alegrías.
Yo encontré alguien.
Old times, good times, new times, best times...
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